EL CUIDADO: ESCENCIA DE LA ENFERMERÍA.

La enfermería se define como una profesión de asistencia, humanística dentro del campo de la salud,cuya esencia es el cuidado; cuidar es la Capacidad de asistir, guardar, conservar, recelar o preocuparse por algo o alguien, Enseñar lo desconocido, en relación a salud o adaptación a enfermedad, enseñar la mejor forma de cuidar la salud, fomentar el auto cuidado.

Es sabido, que el cuidar, es una actividad indispensable para la supervivencia, desde que la humanidad existe, el cuidado ha sido relevante constituyendo una función primordial para promover y desarrollar todas aquellas actividades que hacen vivir a las personas y a los grupos.

Los cuidados de enfermería se basaron inicialmente en valores morales y religiosos, puesto que  las personas que ejercían los cuidados eran mujeres con escasa formación académica y además debían pertenecer a órdenes religiosas , luego de la intervención de Florence nightingale, cambio la visión que se tenía de los cuidados debido a que ella enfatizo en que la persona que los prestaba debía tener una formación adecuada que le permitiera desarrollar este servicio;  su aporte ha sido de vital importancia en la historia de la enfermería, ya que la educación en esta profesión  es un requisito muy importante para poder brindar buenos cuidados.

¿Qué importancia tienen los cuidados de enfermería en la vida de los seres humanos? ¿Será importante la educación para brindar buenos cuidados? ¿Qué métodos se deben utilizar para brindar cuidados de enfermería? Estos son interrogantes que nos planteamos y que desarrollaremos a continuación.

Cuando hablamos de cuidado como capacidad de asistir nos referimos a todas aquellas acciones que se encaminan a la recuperación y restablecimiento de las  funciones fisiológicas del paciente, es importante tener en cuenta la responsabilidad que debemos tener los profesionales de enfermería al desarrollar el proceso de atención y educación. Educar es de vital importancia para que se dé un buen aprendizaje por medio del cual el paciente conozca sus limitaciones y aprenda  a convivir con ellas y, además, brindarle herramientas que lo incentiven a practicar el auto cuidado.

                                                                                 

Los cuidados de enfermería son importantes en la vida de los seres humanos como lo plantea boff (1999)  “…Sin el cuidado, el deja de ser humano. Si no recibe cuidado, desde el nacimiento hasta la muerte, el ser humano se des-estructura  pierde sentido y muere rápidamente. Si a lo largo de la vida, no se hiciera con cuidado todo lo que se emprende se acabaría por perjudicarse a sí mismo y por destruir lo que se tiene alrededor” .Estamos de acuerdo con Boff puesto que el cuidado ocupa un espacio  indispensable en nuestra vida puesto que debemos recibirlos como parte fundamental en el desarrollo, físico, psicológico y social, y además en nuestra profesión es tomado como parte esencial el respeto a la vida y el cuidado profesional del ser humano por este motivo surge la necesidad de reflexionar acerca de la importancia del cuidado de enfermería.

 Los enfermeros no  debemos dejar de lado la enseñanza ni descuidar muchas veces las áreas de promoción, prevención y rehabilitación, razón por la cual nuestras intervenciones se enfocan hacia la realización de cuidados inmediato. Pero dejar nuestra enseñanza al mero actuar con el paciente hace que nuestro rol como profesionales de la salud sea incompleto y limitado, por eso consideramos que la formación de enfermeros en educación es la llave que abre al cambio, sin dejar de intervenir en el tratamiento podremos actuar mejor en las áreas descuidadas.

La educación nos permitirá ver más allá del momento mismo de internación o del contacto con el paciente, pudiendo valorar las necesidades actuales y futuras que interfieran en la salud del niño y en el proceso de la familia. Diagnosticando según la preocupación de la familia y su interés por aprender los cuidados del recién nacido o detectando riesgos causados por el déficit de conocimientos de los mismos.

De esta manera la planificación de nuestro cuidado se verá dirigida al cumplimiento de los propósitos y objetivos planteados teniendo en cuenta la elección de los métodos didácticos apropiados para la persona a enseñar y para la información que transmitimos. Mediante una ejecución flexible y una evaluación no sólo de los conocimientos aprendidos sino también de los métodos utilizados.  

 Aquellos que elegimos el cuidado sabemos que tenemos un alto impacto en la salud futura de nuestros pacientes. Si logramos reconocer el momento adecuado para transmitir la información precisa, seguramente podremos influir en dirección hacia una mejor calidad de vida.

Por esto aprender a enseñar va a marcar la diferencia en nuestro cuidado, pero principalmente en la vida de nuestros pacientes.

Otra herramienta importante a la hora de brindar cuidados de enfermería es la comprensión y apoyo para ayudar a lidiar con frustraciones y emociones. A veces el método más eficaz para lidiar con problemas de comportamiento es modificar el medio ambiente de la persona, o cambiar la reacción de la persona que le cuida.  Puesto que las habilidades de la persona para aprender y cambiar están limitadas, aquellos a su alrededor deben adaptarse y tener expectaciones realistas. La persona se sentirá más a gusto en un ambiente con el cual está familiarizada. Un ambiente tranquilo y ordenado disminuye la agitación del enfermo. Es importante comprender los cambios de humor de la persona puesto que en algunos momentos no pueda funcionar debido a sus emociones.

 Pasar tiempo agradable haciéndole compañía al paciente le trae beneficios  y rodearan a este de una seguridad que ayude a su recuperación.

Para concluir,  los cuidados son de vital importancia en nuestra vida, también podemos  afirmar que damos “cuidado de enfermería”  cuando utilizamos el conocimiento surgido de la ciencia del cuidado como respaldo de las acciones de cuidar y hacemos un arte de la conjugación de la ciencia con la interrelación enfermera-paciente.

“Para curar hay que conocer la enfermedad, para CUIDAR hay que conocer la persona” (E. Nájera)

El cuidado de enfermería es el cuidado de una vida humana, su comprensión implica el complemento de saberes y el mirar la vida como realidad, como interacción social en el que la persona es el centro de atención. Teniendo  en cuenta las habilidades, las actitudes y sentimientos del cuidador y el paciente en un nivel ético y humano.

El interés científico y el uso de la tecnología por parte de los profesionales de la salud tienden a desplazar el componente humano en la relación enfermera usuario, por lo tanto  debemos tener en cuenta que: “la humanización del cuidado es una responsabilidad profesional ineludible, implícita en el quehacer asistencial y reto para la ética profesional”.